pareja, psicología, psicoterapia, relaciones

Faltas de Respeto en una Relación

El respeto es uno de los factores esenciales para una relación saludable. Las relaciones sin respeto están condenadas al fracaso. Es más, se piensa que el desprecio (una forma concentrada de falta de respeto) es uno de los principales predictores de divorcio. Personas que son groseras, desleales y que no prestan importancia a su relación pueden entrar en un patrón de relaciones poco duraderas.

Sin embargo, las faltas de respeto en ocasiones no son intencionales. El trauma, problemas de autoestima y hasta una falta de experiencias románticas son factores que influencian comportamientos irrespetuosos involuntarios.

Afortunadamente estas dinámicas negativas se pueden cambiar con esfuerzo consciente. Si una pareja irrespetuosa pone el esfuerzo para ser consciente de respetar, todavía puede cambiar si se le da la oportunidad. En muchas ocasiones sirve tener en cuenta el dicho “trata a los demás como te gustaría que te trataran a ti.”

Estamos acostumbrados a tomar en cuenta faltas de respeto abusivas y extremas, como son los golpes, los gritos, los insultos y las amenazas. Pero olvidamos que las faltas de respeto pueden tomar diferentes formas menos explicitas que igualmente causan daño en una relación. Aquí exploremos las más comunes.

La ley del hielo

Cuando dos personas tienen una discusión, ambas tienen el derecho a tomarse un tiempo si están molestos, para calmarse y pensar antes de sentarse a tener una conversación más productiva. Sin embargo, si las discusiones llevan con frecuencia a “la ley del hielo” en lugar de la comunicación, usualmente es una forma de manipulación. La ley del hielo (o “dejarse de hablar”) es una clara falta de respeto. Esto sucede ya que con el tiempo te sientes hecho a un lado y desesperado por el suspenso. Quieres saber que hiciste mal, que tan mal están las cosas y que va a pasar después. De esta manera, la persona que falta el respeto está utilizando el silencio como una medida de castigo. De esa forma, puede controlar tus emociones e incitar a que asumas la culpa. Aparte del abuso emocional, usar consistentemente la ley del hielo significa que tu pareja no te respeta lo suficiente como para compartir la razón por la cual está siendo tan resentido/a.

Nada beneficioso surge de la ley del hielo, porque es manipulativo, irrespetuoso y para nada productivo. No se te brinda la oportunidad para aclarar el malentendido o explicar tu versión de la historia. Algunas señales de la ley del hielo son dejarse de hablar durante un tiempo considerable (días o semanas), no contestar llamadas o mensajes, contestar de una forma fría y/o cortante y evitar cumplir con planes y salidas.

Sin una conversación adecuada, no existe forma de arreglar la raíz del problema cuando sucede y solo garantiza que el problema resurgirá y probablemente el mismo trato junto con el problema. Para muchas personas, que su pareja le aplique la ley del hielo no es tolerable, por lo que toman la decisión de terminar la relación ya que no pueden lidiar con ese comportamiento toxico.

Incapacidad para escuchar

Si una persona tiene algo que decir, la otra persona debe estar dispuesta a escucharle. Esta es una regla fundamental para cualquier relación ya que es una expectativa de intercambio equivalente. Sin embargo, ¿Qué pasa si tu pareja nunca quiere escuchar lo que tienes que decir o no te deja hablar?

No solo es esta una señal de una grave falta de respeto, pero es también una forma de abuso emocional y no debería ser tolerado.

La incapacidad para escuchar se manifiesta de muchas formas, así como:

Tu pareja se muestra constantemente distraído y por lo tanto solo medio prestando atención a lo que estás diciendo. Está viendo su teléfono mientras le hablas o tiene la mirada en otra cosa que indica que su mente está en otro lado.

Te ignora por completo esperando que dejes de hablar si no muestra ningún interés. No le importa el tema que se está discutiendo y se siente como que estás hablando con una pared. Si contestan, es en un gesto mínimo y cortante. Sin embargo, si hace esto en el contexto de una pelea o discusión agitada, puede que lo haga para evitar que la situación escale, por lo que probablemente es una buena decisión. Pero si sucede en el contexto de una conversación cotidiana, es una falta de respeto.

Cada vez que hablas te interrumpe y habla por sobre ti. Las interrupciones solo significan una cosa, que lo que tiene que decir es mucho más importante que lo que tú estás pensando o sintiendo.

Aparte de la falta de respeto, las personas que no quieren escuchar pueden pensar que son superiores al otro. De ser el caso, es poco probable que esa persona te trate como se trataría a sí mismo.

Si tu pareja no puede escucharte en ese momento o no quiere hacerlo porque esta cansado o tiene un terrible dolor de cabeza, lo adecuado es que te lo comunique y aborden el tema en potro momento.

Indiferencia al espacio personal, libertad o decisiones de la pareja.

En una relación respetuosa, balanceada y equitativa, ambos conyugues se caracterizan por su individualidad. Son libres de perseguir sus objetivos, tomar sus propias decisiones y realizar sus actividades cotidianas. La única diferencia es que en lugar de hacer esto solos, ellos deciden compartir su vida con otra persona.

Una señal que tu pareja es irrespetuosa es si te hace sentir que no puedes ser un individuo. Sientes que no tienes el tiempo, espacio, libertad o independencia para ser tú mismo. Tal vez tu pareja se enoja cuando estás haciendo algo sin ella o requiere de largas explicaciones sobre tus planes. Tal vez se moleste cuando hagas tus propios planes o tomes decisiones sencillas sin consultarle. Puede que curiosee tus pertenencias personales, como tu teléfono, computadora, correo electrónico o diario. En casos extremos, la pareja irrespetuosa puede acudir al acoso o la violencia.

En estas relaciones constantemente sientes que tu pareja no confía en ti, que continuamente cuestiona tus decisiones o que invaden tu privacidad. Si es así, es mejor reevaluar la relación. Tu pareja debe cambiar o tal vez sea el momento de seguir adelante.

Falta de consideración por los límites.

Todas las personas tienen limites o cosas que les agradan y desagradan. Generalmente, las personas están de acuerdo con que los limites son líneas invisibles que no se deberían cruzar sin autorización. Sin embargo, las parejas irrespetuosas, pueden pensar que los limites no importan. Sin respeto, una pareja puede empujar los límites del otro y hacerlo sentir incomodo. Esto puede ser un gran problema.

La falta de consideración por los limites se puede manifestar de diferentes formas. Por ejemplo, contar tus detalles íntimos a otras personas sin tu consentimiento, tomar dinero prestado y no devolverlo, presionarte para tener contacto físico o sexual no deseado, invadir tu espacio personal después que le has dicho que no lo haga, insistir en que le digas lo que estas pensando, interactuar de forma inapropiada con terceras personas, mentir u ocultar información relevante.

Puede ser agotador lidiar con una pareja que constantemente irrespeta tus límites. Idealmente, deberías iniciar una relación examinando y comunicando tus límites. Lo que tu pareja puede y no puede hacer debería ser establecido temprano en la relación. Ya sean limites emocionales, físicos, sexuales o espirituales, todos los limites deben ser respetados.

Falta de consideración y hábitos desconsiderados

La falta de consideración puede parecer como algo poco importante. Podría ser algo simple, como no ayudar a cargar algo pesado, no ayudar a lavar los platos, manejar peligrosamente o no ser puntual. Tal vez te sentías enfermo y tu pareja no lo notó o no hizo algo para ayudarte. A largo plazo, la falta de consideración puede acumular resentimiento de parte de uno, mientras el otro continúa actuando de forma egoísta.

Esto es una falta de respeto ya que tu pareja constantemente hace cosas sin pensar en cómo eso te afecta a ti. Tu pareja opta por hacer solo lo que se siente bien para el/ella en ese momento. Al principio pueden ser cosas pequeñas, pero puede ir escalando. Pueden llegar a ser decisiones grandes o situaciones importantes. Si tus sentimientos no están siendo considerados o es necesario constantemente recordarle que tienes sentimientos, es necesario hablar al respecto.

Es completamente normal que te irriten algunas cualidades o hábitos de tu pareja, especialmente después del periodo de la “luna de miel”. Aun en relaciones largas, puede haber algunos hábitos que te molesten, como su forma de masticar, su rutina matutina o que deje la toalla en el suelo. Pero hay una diferencia entre habidos inofensivos y hábitos irrespetuosos y desconsiderados, especialmente cuando ya han hablado al respecto. Tal vez eres asmático y tu pareja fuma e insiste en fumar dentro de casa, tal vez le pides que sea puntual para que no afecte tu puntualidad en tu trabajo, puede ser que le pidas que gaste menos para mantenerse en presupuesto. Si tu pareja no intenta mejorar aún después de abordar el tema en varias ocasiones, es una clara falta de respeto hacia ti.

Coquetear con otras personas.

Darte cuenta que tu pareja coquetea con otras personas puede ser un duro golpe. El interés manifiesto de tu pareja por alguien más puede ser una gran señal de alerta que tu pareja no está tomando en consideración tus sentimientos. Las infidelidades físicas o emocionales son una clara falta de respeto que lleva a la ruptura de la confianza.

Mentiras y “gaslighting”

La falta de honestidad es un comportamiento irrespetuoso y destructivo que no tiene lugar en una relación. Tu pareja no está obligada a decirte todo sobre su vida, ni tu con tu pareja. No es necesario contarse cada detalle diminuto e insignificante sobre sus existencias. Sin embargo, las cosas que son relevantes para la estabilidad de la relación, la confianza y el respeto, deben ser comunicadas. Alguien que constantemente te miente no le importa el impacto que sus acciones tienen en tu vida. Solo está pensando en cómo le afecta a él/ella.

Algunas personas piensan que son las grandes mentiras, como una infidelidad, las que importan más. En realidad, son las mentiras pequeñas y casi insignificantes que sirven como un punto de quiebre porque esas mentiras poco a poco destruyen la confianza. Si tu pareja no puede ser honesta sobre cosas menores, te preguntaras si deberías preocuparte por si puedes confiar en cosas más importantes.

Esto también incluye las mentiras por omisión. Cosas que tu pareja elige no comunicarte y luego terminas enterándote. Demuestra que es capaz de ocultarte algo y que no te tiene el respeto suficiente como para hacerte saber que está pasando. Si tu pareja no comparte nada contigo, probablemente no es por algo bueno o beneficioso para la relación.

Un gran problema es que muchas personas ignoran la deshonestidad y excusan que sus parejas no les comuniquen algunas cosas.

En peores casos, algunas personas son víctimas de “gaslighting”. Esta es una forma de manipulación psicológica donde tu pareja a propósito hace que dudes de tu percepción, recuerdos o juicio. Minimiza tus sentimientos y necesidades a un punto donde puedes llegar a sentir que estas exagerando, que te equivocas o que seguramente solo estas pidiendo demasiado.

En una relación saludable y respetuosa, ambos deben permanecer completamente honestos el uno con el otro.

Expectativas poco realistas

En algunas ocasiones las personas esperan de sus parejas cosas que no son realistas, o son inalcanzables para cualquiera. Espera que seas perfecto en todo sentido y que te comportes perfectamente en todo momento. Esto ignora el hecho que tú eres una persona que tiene su forma de pensar, sentir, comportarse y tus propias necesidades también. Cuando tu pareja no toma en consideración tu individualidad y solo desea que seas un personaje que existe solo para complacerle, no está respetando tu individualidad. Para tu pareja solo existes para satisfacer sus necesidades y las tuyas no sin importantes. Además, deben tomar en cuenta que la pareja es un ser humano que puede cometer errores, puede tomar malas decisiones, equivocarse y hacer algo que hiera sin la intención de causar daño.

Falta de apoyo

La falta de apoyo se manifiesta de muchas formas, pero todo se reduce a la falta de respeto. Cuando tu pareja espera que estes allí en sus momentos difíciles, pero no está para ti en los tuyos, indica el poco respeto que te tiene a ti y a tu vida. De cierta forma los problemas de uno son los problemas del otro, por algo son una pareja. Pero si tu pareja se desentiende de tus problemas y sientes que no tienes a nadie en tu esquina con quien apoyarte para, aunque sea darte una opinión o abrazarte mientras te sientes mal, esa persona no desea realmente ser tu pareja.

Incapacidad para negociar o llegar a cuerdos

En una relación no siempre puedes tener todo lo que quieres todo el tiempo. Algunas veces hay que hacer sacrificios, negociar y formar acuerdos para que ambos se sientan cómodos en situaciones donde no están de acuerdo o donde están acostumbrados a hacer las cosas de diferentes formas. Pero si tu pareja se rehúsa a llegar a esos acuerdos o respetarlos y en cambio solo espera que hagas lo que tu pareja quiere que hagas o regresa a hacer lo que quiere faltando al acuerdo que formaron, son claras faltas de respeto. Si no se molesta por tener consideración sobre lo que quieres o necesitas, probablemente piensa que eres inferior, por lo tanto, lo que quieres y sientes es menos importante que lo que tu pareja siente o quiere.

Promesas rotas

Cuando tu pareja constantemente hace promesas, pero no las cumple, demuestra que no te respeta a ti y no pone a su relación como una prioridad. Las personas que realmente le importas harán un esfuerzo para evitar decepcionarte. Todos cometemos errores y nadie es perfecto, pero cuando tu pareja repetidamente no cumple con su palabra, está dañando la confianza y no se preocupa por repararla.

Se reúsa a pasar tiempo contigo y tu familia

Aceptar a alguien como pareja significa aceptar a sus amigos y familia también. Aunque no le agraden, se espera que se traten con respeto. En lugar de rechazarlos, les debería tratar con educación y prudencia. Cuando tu pareja se rehúsa a compartir con las personas que te importan, significa que no te respeta a ti.

Presión por cambiarte

Cuando una persona te ama y te respeta, jamás te pedirán que seas alguien que no eres. No te presionaran para que cambies tus hobbies o intereses, como te vistes, como actúas y quienes son tus amigos. Te amaran y aceptaran tal como eres.

Sin embargo, que tu pareja te recomiende que reconsideres algún habito o amistad que puede estarte causando daño, no es una forma de controlarte. Si haces el cambio o no, no significa que te amara más o te dejara de amar por eso. Tal vez tu pareja solo quiere lo que es mejor para ti sin que dejes de ser quién eres. Pero no está bien que quiera que seas diferente o alguien mejor porque no eres suficiente para tu pareja.

Dejar que la otra persona sea quien es, es una señal de respeto.

Leave a comment