Miedo al Fracaso

El miedo al fracaso, el cual en ocasiones se denomina como atiquifobia, es un miedo irracional y persistente al fracaso. En algunos casos este miedo puede surgir como una respuesta a una situación específica. En otros puede ser relacionado a otra condición de salud mental como la ansiedad o depresión.

El miedo al fracaso puede también estar relacionado a ser una persona perfeccionista. Ya que las personas perfeccionistas tienen elevadas expectativas sobre como esperan que sucedan las cosas, pueden experimentar un miedo persistente que no podrán alcanzar esos estándares elevados poco realistas.

Identificar el miedo al fracaso

El miedo al fracaso puede afectar a las personas en una variedad de formas, por lo que no siempre es fácil de identificar. Algunas de las formas en las que las personas experimentan el miedo al fracaso son:

• Creen que no tendrán las habilidades o conocimientos para alcanzar un objetivo.
• Procrastinar o postergar las tareas al punto en el que afecta su desempeño o la habilidad de terminar sus tareas a tiempo.
• Comunicando a los demás que probablemente van a fracasar para que las expectativas se mantengan bajas.
• Desestiman sus habilidades para evitar decepcionarse.
• Son pesimistas con respecto a los resultados que obtendrán.
• Preocupándose que imperfecciones o problemas harán que los demás le vean de menos.
• Preocuparse que decepcionarán a los demás si fracasan.

En algunos casos, el miedo al fracaso puede causar que las personas eviten por completo intentarlo. Porque tienen tanto miedo de intentarlo y no lograrlo, simplemente deciden no intentarlo para prevenir un posible dolor, decepción o vergüenza.

Causas del miedo al fracaso

El miedo al fracaso se puede desarrollar en cualquier momento de la vida, pero sigue un patrón de factores biológicos y ambientales que contribuyen, como experimentar eventos traumáticos o tener padres que ejercen presión por ser triunfador.

Cuatro de las causas más comunes son:

• Patrones aprendidos de los padres. Los padres tienen una tremenda influencia sobre los hijos con respecto a este tema. Hijos cuyos padres son sobreprotectores o depositan un alto valor sobre sus logros o éxitos pueden aumentar las probabilidades que sus hijos desarrollen un miedo al fracaso.
• Experiencias traumáticas y estrés elevado. Estrés elevado y experiencias traumáticas están vinculadas a una variedad de condiciones en salud mental, incluyendo el miedo al fracaso. el abuso físico, sexual o emocional o negligencia emocional son también posibles causas.
• Factores genéticos y biológicos. La ansiedad tiene un componente genético, por lo que la composición genética de una persona puede ser un factor contribuyente para el desarrollo del miedo al fracaso. cuando uno de los padres sufre de ansiedad, algún trastorno de ansiedad o alguna fobia, los hijos tienen una probabilidad mayor a padecer de situaciones similares.
• Perfeccionismo. Una persona con una necesidad intensa y desmedida por ser perfeccionista podría desarrollar un miedo al fracaso. la principal diferencia siendo que alguien perfeccionista se enfoca en los logros y el éxito. Alguien con miedo al fracaso se enfoca en el dolor o tristeza a causa del fracaso. Puede ser que, si alguien se empeña por presentarse como perfecto, cualquier fracaso no será aceptable y temido.

Impacto del miedo al fracaso

El miedo al fracaso puede impactar a una persona de diferentes maneras:

• Baja autoestima. Estas personas pueden desarrollar un dialogo interno negativo o tener baja confianza en sí mismos que hace que se les dificulte perseguir sus objetivos.
• Poca motivación. Cuando las personas le temen al fracaso, también pueden experimentar una falta de motivación que hace que se les dificulte iniciar un proyecto y trabajar a favor de un objetivo. Cuando algo les parece demasiado demandante o involucra aprender nuevas habilidades, pueden simplemente rendirse o rehusarse a iniciar.
• Autosabotaje. No es poco común que las personas que temen el fracaso realicen actos de autosabotaje que minimizan sus propias posibilidades de éxito. Estudios muestran que, por ejemplo, los estudiantes que temen el fracaso frecuentemente desarrollan comportamientos de autosabotaje que en realidad limitan su éxito académico y perpetúan el fracaso.
• Vergüenza. El miedo al fracaso con frecuencia se asocia con el miedo a experimentar vergüenza. El fracasar puede desencadenar sentimientos de inutilidad, así que evitar intentarlo puede servir como una forma de protegerse de la decepción, arrepentimiento y tristeza.

Tratamiento para el miedo al fracaso

• Terapia Cognitivo-Conductual (TCC). La TCC es una forma de psicoterapia que ayuda a cambiar los pensamientos negativos asociados al fracaso. el terapeuta ayuda a ver que algunas cosas que se perciben como “fracasos” son en realidad oportunidades positivas para aprender y crecer. Em terapeuta también brinda estrategias útiles para afrontar con el miedo y la ansiedad, así como ejercicios de respiración y meditación.
• Terapia de exposición. Exponerse gradualmente a la fuente del miedo puede ayudar a superar la respuesta de miedo. Por ejemplo, el terapeuta puede recrear un escenario donde se ha fracasado en el pasado. Eso se realiza en un espacio seguro y de apoyo para darse cuenta que no hay un peligro o amenaza real de fracaso.
• Medicamentos. Si la persona sufre de alguna enfermedad mental como la ansiedad o la depresión, los medicamentos pueden ayudar a manejar los síntomas. Sin embargo, los medicamentos normalmente no son la primera opción como tratamiento.

¿Cómo no tenerle miedo al fracaso?

Es importante reconocer que en todo lo que hacemos, siempre existe una probabilidad de que podamos fracasar. Enfrentar esa posibilidad y aceptarla no solo requiere de valentía, sino que también nos brinda una vida más llena y gratificante.

Sin embargo, aquí hay algunas formas para reducir el miedo al fracaso:

• Analizar todos los posibles resultados. Muchas personas experimentan miedo al fracaso porque tienen miedo de lo desconocido. Se puede reducir ese miedo al considerar todos los posibles resultados.
• Aprender a pensar de forma más positiva. El pensamiento positivo es una forma increíblemente poderosa para construir confianza y neutralizar el autosabotaje.
• Evaluar el peor escenario posible. En algunos casos, el peor escenario posible puede ser genuinamente desastroso y podría ser perfectamente racional temerle al fracaso. sin embargo, en otros casos, este peor escenario podría no ser tan malo y reconocer esto puede ayudar.
• Tener un plan de contingencia. Si se tiene miedo al fracaso, tener un “plan B” puede ayudar a sentirse más confiado sobre entrar en acción.

Un consejo del Lic. Escobar

El miedo al fracaso es algo que todos experimentamos de vez en cuando, pero es mucho mas problemático cuando estas emociones se vuelven persistentes. Se comprensivo/a contigo mismo/a y trabaja en tomar pequeños pasos hacia adelante, construir la confianza en ti mismo/a y manejar tus miedos.